lunes, 5 de julio de 2010

Fuegos hormonales

En los últimos días, evidentemente, se compraron fuegos artificiales. Para que escoltaran al triunfo de Argentina el sábado.
Empezaron a hacerse escuchar, tímidamente, unas horas después. Algunos, al menos. Aislados. Desasociados. Envueltos en silencio a lo largo del resto del sábado y del domingo. Quizás los prendían sólo por haberlos comprado. Tal vez, para dar aliento incluso en el fracaso. O puede ser que los hayan encendido con el fin de festejar otros triunfos.
Por ahí el chiste de un sobrinito merecía un petardo.
El haber conseguido trabajo se aplaudía con una cañita.
Aprobar un parcial, con un rompeportones.
Conseguir departamento, con estrellitas.
Cada vez que un fuego artificial estallaba en la calma del fin de semana, alguien era feliz.
Pero el lunes ha llegado.
Y, con él, bocinas y caños de escapes y motores y ringtones y bocinas y pedidos de teamleaders y protestas y comentarios sobre tal escándalo en la televisión o sobre tal otro y bocinas y más bocinas. Si alguien es feliz ya no se lo escucha.
Me pongo entonces los auriculares, sabiendo que cualquier alegría es callada por la ciudad. Y subo en el ascensor como quien desciende al infierno.
Y ahí está ella.
La recepcionista nueva. Su primer día.
Me mira. Sonríe. Y me saluda con la manito. Voy hasta ella y le doy un beso. Su perfume. Sus ojos. Es. Su sonrisa. Su mirada. Seguramente. Seguramente hizo lo mismo ya con los 63 empleados que no llegaron tan tarde como yo. Seguramente no hay nada de especial en su saludo. Pero, de todas formas, a la hora del almuerzo bajaré y me compraré unos chasquibums para anunciar mi felicidad. Y que la ciudad trate de callarme si se atreve.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Como quieras llamarlas, las revoluciones hormonales, las mariposas en el estómago, la sangre al galope por las venas, siempre son razones para festejar.

Anónimo dijo...

Wilfredo, como va. Pregunta. ¿Sos futbolero? ¿Te amargaste con el triunfo de la selecciòn? ¿No te importa el fútbol ni el mundial, ni nada? Espero que puedas responderme. Abrazo

Anónimo dijo...

Wilfredo, soy el del comentario anterior. Evidentemente pifié y te pregunté si te habías amargado con el triunfo de la selección, nada que ver. ¿Te amargaste con la derrota de la selección? Corrijo porque los usuarios de internet somos crueles con las personas que se equivocan. Ahora sí. Saludos

F dijo...

¡Oh, por Dios! ¡Lo perdimos!

Wilfredo Rosas dijo...

Señor o señorita anónimo,
Le remito a un post:

http://entrecorbatasyescotes.blogspot.com/2009/10/una-pasion-que-trasciende-al-rio-de-la.html

Y no. No soy futbolero. Puedo ver un partido, sí. Puedo insultar incluso. Puedo dar recomendaciones a los jugadores como si me pudieran escuchar y como si mi palabra tuviera algún valor. Puedo indignarme por un pase errado. Aplaudir la trayectoria agraciada de la pelota.
Pero porque juego.
Juego a ser espectador de fútbol. Porque también puede no importarme. También puede me resultar jocoso que la gente llore y deje cosas de lado y se enoje y rece y grite y celebre por días y hable y hable y hable y lea notas en el diario y mire programas en la tele sobre algo que es un juego.
Si mantenemos el mismo comportamiento y reemplazamos el fútbol por las escondidas, por ejemplo, escucharíamos las siguientes cosas...
"Me acuerdo del partido de las escondidas del 67. Mancuso se escondió detrás del árbol. Y a último minuto, Rogelio le cantó piedra libre a Ramiro que estaba mal escondido detrás de un coche."
"La puta madre, Rodrigo. Escondete bien atrás de esa puerta. Es un enfermo. Este Rodrigo es un enfermo. No sé porqué no lo cambian. Es que está todo arreglado. Una vergüenza."
"El problema es que el DT lo pone a Gonzalo a esconderse detrás de un arbusto cuando Gonzalo es un nato escondedor detrás de árboles."
"¡Réferi! ¡Eso fue penal! ¡¿Cómo no ves que Pepe dice punto y coma el que no se escondió se embroma despacito así nadie se aviva y los pesca a todos en la mitad?!"
"Nos encontraron a Ramiro escondido detrás de un poste de luz. A Facundo detrás de unas maderas. Y a Romina detrás de un coche. Estoy con el ánimo por el piso. No puedo más. No tengo ganas ni de levantarme de la cama."
....Pero quizá sólo sea yo.
Espero haber respondido su pregunta, señor o señorita anónimo.

Anónimo dijo...

Muchas gracias señor Wilfredo. Soy el señor que le preguntó sobre si es futbolero o no. Por cierto, me llamo Esteba. Quería decirle que lo suponía, pero tenía que preguntarle, quizás se escondía un futbolero empedernido. Un gusto. Hasta la próxima

Anónimo dijo...

Clap, clap, clap. Wil nos metiste dos (y media) lecturas en una. Ya que me llevaste a recordar si eras Serbio, Tailandés, mendocino, etc.

Fenómeno.


Chapa.

chicosoquete dijo...

Hace añares que no venía por aquí. es más, ni sabía si seguí existiendo, pero hoy en mi shuffle saltó Laag Bij De Grond, tremendo tema, de tremenda banda y recordé que la había escuchado por primera vez aquí.

Así que gracias.

Une fille dijo...

Se ve que las recepcionistas nuevas inspiran...

une fille dijo...

No?

Une fille dijo...

(?)

Une fille dijo...

:P

Anónimo dijo...

Al fin algo de valor