En mis cuatro años acá, esta oficina supo ser un Infierno. Un Limbo. Un desierto. Un calabozo. Una burbuja. E incluso, recientemente, una máquina de tiempo.
Hoy es un dibujito animado.
Pastelito está reunido en la sala de conferencia. De vez en cuando sale y va corriendo a su computadora. Se sienta y protesta. –¡Esta no es mi silla!- refunfuña. Se para, atolondrado, busca la suya. Se sienta. Investiga algo en su computadora, lo anota en un post-it y vuelve corriendo a la sala de conferencias.
Espero que cierre la puerta. Voy hasta su escritorio. Ya le cambié dos veces la silla. Esta vez decido dejarla ahí pero sacarle las ruedas. Las escondo en su cajón. Vuelvo a mi lugar. Finjo disimulo y observo.
Pastelito sale corriendo y se sienta. –¡¿Quién es el graciosito?!- protesta. Pero no tiene tiempo de encontrar al culpable. Apenas refunfuña y vuelve a la sala de conferencias.
Sueno mis dedos, como Bugs Bunny antes de tocar el piano. Me levanto, voy hasta el escritorio de Pastelito. Hice esto de la silla tres veces. Si bien Victoria me mira sonriente esperando que lo repita, no quiero sentirme como Francella, obligado a repetirme. Decido subir un poco la apuesta. Desconecto el monitor de Pastelito. Vuelvo a mi lugar. Me siento. Miro.
Pastelito abre la puerta de la sala de conferencias. Va hasta su escritorio. Se sienta. Vuelve a protestar por la silla sin ruedas. Mueve el mouse. Lo vuelve a mover. Mira al mouse. Mira al monitor. Vuelve a mover el mouse. Toca el teclado. Golpea una tecla. Mueve el mouse. Se para. Mira alrededor, desorientado, como Kramer en el final del capítulo del estacionamiento de Seinfeld. Se sienta. Golpea al monitor. Nada. Se para. Revisa el cable. Lo enchufa apropiadamente. Se sienta. Suspira. Anota lo que tiene que anotar y sale corriendo.
Entrecierro los ojos. –Si tan sólo tuviera la cáscara de una banana para dejarla en el medio esto sería perfecto.- susurro.
Me paro. Voy hasta su escritorio. Desconecto, de nuevo, el monitor. Se abre la puerta de la sala de conferencias. Pastelito detiene su trote ridículo. Me mira. Frunzo los labios. Todo estaba tan cerca de ser perfecto.
Hasta pronto
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Como habrán notado, las historias de Donato quedaron en almanaques pasados.
Los invito a pasar por https://www.facebook.com/safarijirafas donde estoy
subien...
Hace 10 años
17 comentarios:
ay
ese ES will!
ups ... o a la homero... "OU"
Ouch.
Uuuuuuuuuh! Bueno, podes decir que estabas poniendo el cable en su lugar, y que Victoria salga a defender tu coartada... aunque no se si sirva.
Jajaja, pero muy bueno :P
Te salva Victoria... te juego lo que quieras...
Buen finde...
creo que aca se define lo que la chica siente, si te salva...
al horno con papas.
Vic, do something.
huuuuuuuuuuuuu
la puta que los pario!!!!!
Bien ahí W!
Por fin algo de acción, el asesino nuevamente al acecho!
Y lo de Kraemer, justo anoche hubo un especial de Seinfeld en Sony y hablaron de ese capítulo, tanta genialidad no creo que vuelva a haber en pantalla.
Rodrigo, vi el mismo especial. Y coincido con vos. Aunque nunca se sabe. Quizás quiero ser optimista en eso y volver a ser fascinado como alguna vez me sentí por el show de Seinfeld.
bien ahí wilson, el post de hoy posta que estuvo muy bien, un poco mas coherente con la genialidad de antes.
dejaste las drogas o se suspendió el "viaje a la india".
buen finde.
PD: reitero mi agrado con el post de hoy.
D'oh!
ta mal si digo q el final era OBVIO?
porfi deja de fruncir los labios
Boludooooooooooo... con mucho cariño ajajja
mira que sos papanatas
Fuiste Willcito xD
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